A esta pasta de espirales le hemos añadido una suculenta salsa de calabaza y requesón.
Consejo del chef:
Las diminutas semillas de sésamo encierran grandes beneficios
para la salud, en los que destaca su contenido en calcio, por lo que es un
ingrediente muy indicado para las personas que no toman lácteos.
INGREDIENTES para 4 personas
350 grs. de pasta
250 grs de calabaza
1 puerro
1 diente de ajo
1 pimiento rojo o amarillo
2 cucharaditas de semillas de sésamo tostadas
Aceite
Sal
Pimienta
Como se
prepara
1. Limpie el puerro y píquelo. Pique también
el ajo pelado. Retire la corteza de la calabaza y corte la pulpa en dados.
Limpie el pimiento y córtelo a tiras.
2. Caliente dos cucharadas de aceite en
una cazuela, añada el pimiento y el ajo picado, y rehóguelo 5 minutos. Retírelos
con una espumadera y reserve.
3. En la misma cazuela, vierta un
poquito más de aceite, agregue el puerro y sofríalo a fuego lento hasta que
cambie de color.
4. Incorpore entonces la calabaza, rehóguela
un par de minutos, removiendo y salpimienta.
5. Vierta un vaso de agua, tape y deje
cocer 20 minutos.
6. Tritúralo todo con la batidora.
7. Cueza la pasta en agua hirviendo con
sal hasta que esté al dente y escúrrela.
8. Mezcle la salsa de calabaza con los
espirales y el pimiento.
9. Reparta en los platos, agregue el requesón
desmenuzado y espolvoree con el sésamo.
10. Sirva enseguida.
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